Cómo hacer
funcionar las tramas secundarias
Se ha dicho que la subtrama o trama secundaria es aquello de lo que una
historia trata realmente. La función principal de la trama secundaria es dar
dimensión al guión. En realidad es la que conduce al rema y profundiza en la
historia. Las tramas secundarias pueden tratar de cualquier asunto, a menudo
son historias de amor que revelan dimensiones adicionales de los personajes. En
muchas obras las tramas secundarias son lo más importante.
La estructura de
las tramas secundarias
Al igual que el argumento principal, los argumentos secundarios tienen
también su principio, su medio y su final. Una buena trama secundaria tiene
puntos de giro, un planteamiento claro, un desarrollo y un desenlace final. Los
puntos de giro de una trama secundaria pueden reforzar los de una trama principal, si tiene lugar justo
antes o después de los puntos de giro principales. Hay ocasiones en las que una
trama secundaria no comienza hasta después del primer punto de giro de la trama
principal.
Casi todas las películas tiene tramas secundarias, algunas logran parte
de su éxito por la habilidad con que se utilizan.
Con cuidado, se puede obtener una buena película con mayor nivel de
complejidad, y pueden orquestarse desde tres hasta siete subtramas.
Problemas con las
subtramas
Las tramas secundarias son responsables de muchos problemas en los
guiones. Algunas películas fracasan porque fracasa la integración de las
subtramas. Estos problemas pueden agruparse en diferentes categorías.
· En primer lugar, muchas veces
las tramas secundarias carecen de estructura. Divagan, están poco
definidas, y desorientan al público, de forma que el espectador no sabe de qué
trata realmente la historia o que es lo que pasa de verdad.
· En otras ocasiones, los
problemas vienen por una falta de integración de la trama secundaria en la
principal. Aunque la subtrama pueda resultar interesante, da la impresión
de estar flotando, inconxa, separada del resto de cosas que suceden en la
historia.
· Hay películas que tienen
problemas por una colocación inadecuada de la trama secundaria. En lugar de
desarrollarse a lo largo de la principal e interferir en ella, se desarrolla
por completo al principio. Como resultado, la trama principal comienza mucho
después, cuando estamos convencidos de que nuestra trama secundaria es nuestra
trama principal.
Aplicaciones
A medida que trabajas con tu trama secundaria, sepárala de tu historia
principal de forma que puedas ver con claridad qué tal funciona por sí sola.
Has de poder determinar cuál es tu historia A y cuál es tu historia B.
Hay que asegurarse de que una vez que se produce el climax de la trama
principal los climax de las tramas secundarias se suceden con rapidez. Si tu
trama secundaria tiene una estructura ajustada, da mayor dimensión a la
principal y se integra en ella, tendrás probablemente una subtrama dramática y
que funciona bien, que puedes aprovechar para decir con solidez lo que quieras
decir.
El segundo acto:
cómo mantenerlo en movimiento
La mayoría de los problemas del segundo acto provienen de la falta de
impulso y de la dispersión de la línea argumental. Estos problemas suelen
plantearse porque la película se desvía de su columna vertebral. Aparecen
escenas sin ninguna relación o la historia evoluciona demasiado deprisa (o
despacio), y se pierden los beats.
Un planteamiento y desarrollo claro del primer acto ayudarán a la
claridad del segundo. Un primer punto de giro fuerte facilita mucho el que el
segundo acto se mueva con fluidez, pero hay otros elementos necesarios para que
el segundo acto mantenga al público interesado durante una hora o más.