Felix Mendelssohn nace en Hamburgo el 3 de febrero de 1809 y es el segundo
de los tres hijos que tuvieron Abraham y Lea Mendelssohn. En 1812 la
familia se trasladará a Berlín que, junto con Lepzig y Dusseldorf, serían
ciudades clave para el desarrollo de su obra. Mendelssohn fue un artista
alemán; no obstante, llegó a recorrer todo el panorama europeo. Las dos
estancias más importantes en su vida fueron Inglaterra, lugar que visitaría en
5 ocasiones desde su primer viaje en 1829 y donde Mendelssohn lograría los
mayores triunfos; e Italia, a donde llega el 9 de octubre de 1830 con gran
entusiasmo y donde permanecerá hasta julio de 1831. Fallece en 1847.
Es autor de música vocal, entre las que destacan 3 oratorios:
Oratorio de San Pablo, de Elias y de Cristo (inconcluso), cerca de 74 lieder para
voz y piano, motetes, salmos, piezas para coro y voces solistas; música
escénica: 3 óperas, entre las que destacan Las bodas de Camacho (ópera
cómica) y Lorelei (inconclusa); música incidental: Athalie (Racine), Antígona (Sófocles), Edipo
en Colonos (Sófocles), A midsummer night's dream, Die
erste Walpurgiancht (Goethe); 5 sinfonías entre las
que destacan la escocesa (Nº3) y la italiana (Nº4); música de cámara:
cuartetos para cuerda, para cuerda y piano, quintetos y sextetos para cuerda;
música para piano y órgano, sobre todo preludios y fugas, sonatas,
fantasías, piezas infantiles; y conciertos.
Los Lieder ohne worte son una serie de piezas compuestas para
piano a lo largo de toda la vida creativa de Mendelssohn y que están recogidas
en una serie de libros. Esta serie de libros recogen piezas compuestas desde
1830 hasta 1846 y, por lo tanto, son un testimonio de la evolución del lenguaje
del compositor. La obra en La menor que nos ocupa, la compone durante su
estancia en Italia, y es una obra de composición temprana en la que muestra la
profunda influencia que tuvo la obra de Bach en él. Recordemos que el año
anterior había estado en Inglaterra para dirigir el estreno de La
Pasión según San Mateo.
El término "Canción sin palabras" (Lied ohne
Worte) lo acuña la hermana mayor de Mendelssohn, Fanny, que, cuando su
hermano le regaló una pieza para piano que él mismo tituló Lied, añadió la coletilla de
"sin palabras" (ohne Worte). De entrada, es razonable
encuadrar este tipo de piezas compuestas para piano a lo largo de su vida en el
género del Lied alemán. No obstante, considerando
las palabras de Herder:
Como ya había exigido Herder del Lied en tanto
que poema, debería encontrarse musicalmente hablando, un “tono” lírico: La
esencia del Lied es el canto, no una pintura; su perfección depende
del canto melódico de la pasión o sensación, que podría llamarse “tonada” según
la antigua y acertada expresión. Si ésta falta en un Lied, éste no posee
ningún tono(...), ya no se trata de un Lied. Schubert distinguía, de un
modo apenas distinto al de Beethoven, entre diversas tradiciones del género
que, si bien aparecían aunadas bajo el nombre genérico de “Lieder und Gesánge,
difícilmente podían concebirse como acuñaciones de un único principio formal.[1]
Atendiendo a esto, podemos decir que la pieza de
Mendelssohn no sigue los criterios estéticos que definen el género dado que
priva a la obra del elemento que la define: le arrebata la palabra.
El opus 19b Nº 2 es el segundo Lied ohne Worte del primer libro y en ella se puede
apreciar el estilo de Bach, especialmente por el tejido contrapuntístico que
desarrolla en toda la obra que y parece sacado de las Invenciones a dos y tres voces o del Clave bien temperado, pero
dentro de una textura y armonía romántica con una melodía flexible, cantabile y, sobre todo, muy expresiva. En
este sentido, la obra sigue la trayectoria de las composiciones más tempranas de
Mendelssohn, en el que el legado de Bach también es patente.
Podemos dividir la obra en 6 secciones: la primera de ellas
A, que va desde el compás 1 al 16 y que se mantiene en La menor antes de
comenzar a modular a Mi menor. En esta sección tenemos el tema principal de la
obra, que consta de tres frases distintas: a la primera de ellas la llamaremos
a1 (c.1-4) y será un motivo recurrente, ya que aparece 5 veces a lo largo de la
pieza; a la segunda la llamaremos a2 (c. 5-8); y a la tercera a3 (c. 13-16). La
frase a1 se caracteriza por un descenso por movimiento conjunto y un salto de
sexta mayor que resuelve en la quinta del acorde por un descenso de medio tono.
La segunda sección, que llamaremos B, comienza en el compás 17, a dos compases
antes de que el centro tonal pase a ser mi menor. Tras esto, entre los compases
30 y 40, nos encontramos con una zona de transición, compuesta por una melodía sobre una dominante mantenida de la menor y de ritmo trocaico, que le otorga un tono
misterioso e insinuante; mientras que en el fondo el bajo va saltando y
cambiando la armonía y la voz intermedia hace arpegios. Es en esta sección
donde se prepara para volver de nuevo a la menor y repetir el tema principal a1
y a2. Seguiríamos con una quinta sección a partir del compás 48 hasta el compás
72, a la que llamaremos C, donde la pieza se mantiene en la menor con algunas
pequeñas flexiones a fa mayor y do mayor y donde nos encontraremos con b1
transportado una quinta descendente. Finalmente llegamos a la última sección,
que llamaremos D, que modula momentáneamente a re menor antes de concluir en la
menor. Es aquí donde nos encontramos con el pico melódico más agudo de la obra
en los compases 80-81, en el que la melodía alcanza un sib y volvemos a
encontrarnos dos veces con el tema a1: la primera, transportado una cuarta
ascendente, y la segunda (que llamaremos d2), a modo de canon con d2, en su
tono original a partir del c. 81.
En la obra se puede apreciar perfectamente la escritura
bachiana, especialmente en los momentos en los que se crea un contrapunto entre
las tres voces del piano como se puede observar en los compases 13-16 de la
sección A o ya más adelante entre los c. 64-68 de la sección C, que son
testimonio de un ejercicio de contrapunto al más puro estilo Bach. O momentos
en los que se origina un contrapunto imitativo por aumentación: así se puede
ver en el c. 22, en el que se reproduce el mismo descenso por movimiento
conjunto que en el c.14 de las tres notas sol-fa#-mi pero con sus valores
aumentados. Asimismo, no hay que dejar de lado la textura romántica que
envuelve esta pieza, ya que encontramos una concepción del bajo profundamente
melódica, segundas aumentadas entre los c. 6 y 7 o determinados giros melódicos
(la#-fa#-do) de los c. 18-19 que no se pueden encontrar en la obra de Bach.
El manuscrito de la composición en La menor Op. 19b N. 2
está fechado en Roma, el 12 de diciembre de 1830 y se considera perdido.
Mendelssohn, antes de publicarlos, se los enseñaba a un público muy reducido mostrando las posibilidades compositivas, por
lo que en muchos casos se pueden encontrar varias versiones de una misma pieza.
Por otro lado, los Lieder
ohner worte pronto se
añadieron al repertorio para la educación pianística.
Songs without Words
Felix Mendelssohn was born in Hamburg on February 3th
of 1809 and he was the second son of three children in a family of Jude origin.
In 1812, the family moved to Berlin, one of the cities that will be important
for the development of his work. Mendelssohn was a German artist; however, he
visited many countries of Europe that influenced in his music. The two more
relevant stays of his life were those made in England and Italy. He visited
England in, at least, five occasions, the first one in 1829, and there he met
the success. He died in 1847.
Among his vocal works, we can find three oratories:
Saint Paul, Elijah and Christ (this last was unfinished), 74 lieder for voice
and piano, motets, psalms and chorus works. Among his scenic music, we find three
operas: The marriage of Camacho,
based on an episode of Don Quixote,
and Lorelei (unfinished) are the most
important; incidental music, music composed for plays like Athalie by Racine, Antigona
by Sofocles or A midsummer night’s dream
by Shakespeare.
The Songs
without words are several piano pieces composed during his entire life and
they are collected in different volumes. The volumes collect the piano pieces
composed between 1830 and 1846, one year before his death. For this reason,
they are a testimony of the evolution of Mendelssohn’s musical language. The
piece in A minor I am going to speak about was composed in Italy in 1830 and it
is a one of the early songs composed by Mendelssohn. We can see the deep
influence of Bach’s work in it. We must remember that the year before,
Mendelssohn was in England conducting the performance of St. Matthew Passion.
The term “Song without words” (Lied ohne Worte in German) was an idea of Mendelssohn’s big sister,
Fanny Mendelssohn. When his brother gifted to her a piano piece entitled “Lied”
(song), she added “ohne Worte” (without words). But, can we really consider
these piano pieces like Lieder? According
to Herder: we must find a lyric tonus in the Lied, the essence of the Lied
is the singing and its perfection depends on the melodic singing. So, for this
reason, we cannot consider these piano pieces like a Lied, because Mendelssohn removes the essence of the lied: the
words.
The opus 19b N 2 is the second Lied ohne Worte of the first book and we can appreciate in it the
influence of Bach’s stile, especially for the contrapuntistic texture developed
in the entire piece. It is a texture that reminds us the Two and three parts inventions or The Well-Tempered Clavier, but the
harmony is purely Romantic with a flexible, cantabile
and, over all, expressive melody.
The principal theme has three phrases and one of them
(m. 1-4) appears five times in the entire piece.
We can appreciate perfectly a Bach writing in
Mendelssohn’s piece, especially in those moments in which there is a
counterpoint between the three voices of the piano, as we can see in measures
13-16 or measures 64-68. Both are testimonies of a counterpoint exercise in
Bach stile. However, we cannot forget that Mendelssohn was a Romantic composer
and we can see elements of his age, like a melodic bass, augmented 2nd
or melodic intervals (A#-F#-C) in measures 16-19 that we never find in Bach
music.
To conclude, I have to say that Mendelssohn often
showed his work to a selected public before publish it, showing the compositive
possibilities too. For this reason we can find different version of the same
piece, as we can see in other “Songs without words” like the number 4 of the
same Op. with two totally different versions. Nowadays, the “Songs without
words” are one of the most important works for the pianistic education.
Bibliografía
JOST/EICKHORST, Christa y Konstanze: Felix Mendelssohn: Lieder
ohne worte, Wiener Urtext Edition.
MENDELSSOHN: Lieder ohne Worte, Henle Verlag
STRATTON,
Stephen: Mendelssohn: su vida
y su obra, Buenos Aires, Anaconda, 1951.
DAHLHAUS,
Carl: La música del siglo XIX,
Madrid, 2014.
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